sábado, 4 de marzo de 2017

Rocío


Eran tu pecho y mi pecho
Susurrándose latidos
¡Era tan dulce momento!
Entonces el sueño vino
y desdibujó el instante.
Permanece aun la esencia
que toda tu piel exhala.

El amanecer fue amable
de serenos despertares.

Leve se pierde mi ser
en un lento caminar
proyectándose a los campos
salpicados de rocío.

Siento el calor de tu risa
En el sol lleno de encanto
Es de oro en tus pestañas
Y se me encienden las ganas.
Voy a explorar los rincones
que con esta luz se alcanzan.









No hay comentarios:

Publicar un comentario