lunes, 13 de septiembre de 2021

De donde

El camino de donde miran mis ojos está lleno de pequeños fragmentos de ilusión y realidad y se dirige  hacia infinitesimales matices de belleza.

En mi camino se mezclan espacios y tiempos. El presente es el elemento transversal a esos fragmentos de pasado y futuro, de deseos y de recuerdos y los abraza como hilo a cuentas de collar.

Mis ojos se apartan poco a poco de esos enormes monstruos del pasado, que cada vez que acuden a mi mente me acojonan y turban mi paz. 

El paliativo a estos miedos atávicos es la búsqueda y hallazgo de la belleza en sus múltiples facetas y manifestaciones. Porque dicen que del amor, que también palía y mucho, es mejor no hablar.

A veces, mis ojos se pierden en la fascinación de otros ojos y muchas veces, anhelan el gran misterio que para mi supone tu mirar, que se me antoja profundo, bello y sensual.

No me gusta mirar lo burdo y abyecto, por eso no quiero detenerme jamás en ello, por más que insista el sistema en bombardear mi camino con ellos. También huyo de las personas y cosas tóxicas que me quitan o podrían quitarme la vida.

Avanzo a mi ritmo, con ese andar peripatético de los clásicos, mientras mis ojos miran a un tiempo y un espacio que todavía no existen, pero que a cada instante construyo, sea o no consciente de ello. Mi camino se va fraguando con pequeñas obras y acciones llenas de la mejor de las intenciones y en ocasiones con excelentes resultados. 

Muchas veces me pregunto quien soy y que hago aquí. Todavía no he encontrado respuesta a esa pregunta. Y muchas otras que transcienden el devenir humano. Pero aquí sigo, en la pelea, sin reconocerme en cada etapa que atravieso, pero amando profundamente la existencia.

Al cerrar los ojos conscientemente, despierta a veces la mente y crea y recrea nuestros sueños más preciados, los que son , fueron y serán. En mi camino éstos son los cimientos y motor de la vida. Muchos sueños son o a mi me parecen irrealizables, pero son un buen entretenimiento: imaginar lo que quieras sin las ataduras de la carne. Analizando un poquito, hurgando en sus entresijos, nos dan una valiosa información de cómo somos realmente.

Empezaba este escrito con una frase que hoy he leído y me ha tocado. Me parece una construcción de frase hermosa. 

Un pequeño regalo bello para una tarde que aspira a ser lluviosa y sueña con ser eterno verano. En realidad es la tarde que me está tocando vivir ahora y que yo puedo aderezar con toda suerte de acciones o inacciones. 

De donde y hacia donde miran mis ojos está hecho mi camino. Y he de decir que sólo se que es de muchas dimensiones.









No hay comentarios:

Publicar un comentario